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7 errores frecuentes al escribir una novela

En primer lugar, es importante saber de antemano que errar forma parte del aprendizaje. A todos nos ha pasado en más de una ocasión y está bien, siempre hay tiempo de volver hacia atrás y tratar de arreglar lo que ahora nos parece que es un error en nuestra novela.


Decidí no centrarme en errores ortográficos o de gramática, sino en la trama o en el desarrollo de la historia al momento de contarla. Yo misma he ido para atrás y para adelante incontables veces no solo con novelas, sino también con relatos cortos y otro tipo de textos.




Es por eso que me pareció oportuno comentarlos aquí, para que otro escritor/lector pueda tenerlos en cuenta y le sirva como guía en el futuro:


  • Pensar que el comienzo y el final de nuestra novela debe ser tal cual lo imaginamos en un principio

Sí, lo entiendo, cuesta mucho dejar a un lado las grandes cosas que teníamos pensadas para nuestra novela. Pero hay una realidad, cuando comenzamos a escribir no siempre los personajes acaban donde quisiéramos. Por supuesto que intentamos plantear todo lo que teníamos planificado, solo que en ocasiones, luego de ciertos giros en la trama, nos podemos dar cuenta sobre la marcha que el mejor comienzo o final para nuestra novela va por otro camino. Un camino que no es el original. Y entenderlo y darle pie a la historia para que tome su propio rumbo es una gran decisión que tenemos que estar dispuestos a tomar.

  • Escribir sobre un tema y no una historia

Como ya he mencionado antes en el artículo ¿Qué tener en cuenta a la hora de escribir y autopublicar tu libro? , las historias cuentan con un principio, un nudo o problema y un final. Y de ese modo es como se debe contar una novela. No basta con establecer un orden determinado de palabras y comentar sobre un tema en particular, también es tremendamente importante guiar al lector desde el principio hasta el final, provocar su emoción, su tensión, su divertimento. Tu novela debe desafiarlo, hacerlo sentir cosas, sea lo que sea, y para ello es necesario que cuentes una historia y no realices un ensayo o informe sobre un tema que te interese.

  • Extenderse demasiado en el planteamiento de la historia

Considero que una de las tareas más difíciles a la hora de escribir una novela es entender que hay momentos en los que debemos omitir partes que nosotros creemos relevantes o que le tenemos mucho aprecio en pos de conseguir simplicidad, agilizar el ritmo y aumentar el suspenso de la novela. Por supuesto que informar al lector sobre el contexto en el que se encuentran los personajes y presentarles a cada uno de estos últimos es un punto importante, pero a veces esa necesidad de hacerlo perfecto y hasta el último detalle puede generar aburrimiento.

  • Desarrollar y describir situaciones/acciones que no son relevantes para la historia

Continuando con la línea de razonamiento del punto anterior, tenemos que aprender a soltar. A mí me ha costado mucho, debo reconocerlo, porque por momentos sentía que debía describir con lujo de detalles una situación en particular que estaba viviendo el personaje para trasmitirle al lector lo que dicho personaje estaba sintiendo. Y de esa forma podría sentirse identificado. Fue solo después de muchas ediciones que comprendí que a veces menos es más y que quizás en lugar de estar ayudando al lector, lo estaba mareando.

  • Utilizar lenguaje exagerado

Como supongo que ya ha quedado claro por lo que he venido mencionando hasta ahora, mi mayor consejo es apostar por lo simple. Contar algo y que un otro lo entienda tal cual como nosotros queremos no es tarea sencilla. Y si bien debemos dar lugar a la interpretación, hay momentos en los que necesitamos que el mensaje sea transmitido como lo deseamos para que los sentimientos provocados se manifiesten a flor de piel. Por lo tanto, en mi caso siempre intento mantenerme fiel a mi estilo de escritura y no creer que un lenguaje exagerado o sofisticado es sinónimo de excelencia.

  • No corregir la historia terminada

Gran gran error que no podemos darnos el lujo de permitir. Siempre lo fue y siempre será extremadamente necesario corregir nuestra novela. Quizás podemos dejarla reposar un tiempito para luego comenzar a leerla desde cero sin estar "contaminados" por el cansancio y el desgaste propio de escribir, pero no así abandonarla para siempre. Si a compartirla, ya sea con personas conocidas o con un extraño, debemos tomarnos el tiempo y la dedicación de corregirla y editarla.

  • No solicitar un informe literario o feedback de algún tipo

No todos podemos contamos con el dinero de solicitar un informe literario, es lógico, pero de ser ese el caso, es importante darle a nuestra novela un espacio para ser compartida. ¿Por qué? Porque las opiniones y consejos externos serán quienes nos ayudarán a ver con otros ojos lo que tal vez a nosotros nos cueste ver. El lector entiende lo que yo quise trasmitir en ese determinado momento? Le pareció aburrido? Preferiría que hubiese utilizado otras palabras en lugar de las que utilicé? El final le resulta a la altura del resto de la historia? Todas estas preguntas y más, es muy probable que solo puedan ser respondidas por alguien que no está tan familiarizado con nuestra novela como nosotros.


Acerca del autor


Nina Flores


Fanática de las palabras, del té en las mañanas de invierno y de la pizza fría del día anterior. Magíster en Dirección de Comunicación y Marketing, y redactora freelance.



Si cuentas con alguna cita o bebé literario que desees publicar, me la puedes enviar para que la comparta en la red colaborativa de lectores y escritores de Instagram!



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